Muchas veces a la hora de poner una casa a la venta no nos damos cuenta de la importancia que tiene esa primera visita, de la impresión que causa en nuestros clientes compradores. Es muy importante dedicarle tiempo a estudiar cómo vamos a preparar nuestra vivienda porque de ese hecho, junto con el del precio, dependerá que recibamos mayor o menor número de visitas.

Una de las películas que mejor ilustra esto que comento y que representa, lo que hacemos muchos agentes inmobiliarios a la hora de poner una vivienda a la venta, es la escena protagonizada por Carolyn Burham (Anette Bening) que aparece en  American Beauty, dirigida por Sam Mendes en el año 1999.

Lester (Kevin Spacey) y Carolyn son un matrimonio perteneciente a la clase media-alta americana. Él es un ejecutivo de publicidad de Chicago, el típico padre de familia frustrado, aburrido y ella una elegante y ambiciosa agente inmobiliaria, obsesionada con el éxito profesional. Ambos tienen una hija, Jane (Thora Birch), de dieciséis años, la típica adolescente apática cuya mejor amiga es Ángela Hayes (Mena Suvari), la guapa animadora del equipo de fútbol del instituto. No podía faltar como ocurre en la mayoría de las series y películas americanas que muestran el éxito y el fracaso profesional, un fuerte competidor para nuestra agente Carolyn. En este caso encarnado en la figura del exitoso pero repelente, creído y estúpido Buddy Kane (Peter Gallegher), apodado el “Rey Inmobiliario” por ser el número uno en ventas. Como comprobaréis, una vez más, siempre hay algún agente antipático que no da buena fama al sector por los métodos empleados en su trabajo.

Volvamos a nuestra película y a Carolyn porque hay una escena que representa muy bien el trabajo que realizamos y la pasión que ponemos los agentes inmobiliarios a la hora de captar una propiedad y prepararla para su salida y venta en el mercado. La escena arranca con una eufórica Carolyn, abriendo las puertas de una propiedad de lujo que acaba de captar, respirando hondo, sonriendo y gritando: ¡Hoy venderé esta casa!

Como veréis, la casa no está muy presentable. Dejémoslo en que no está en las condiciones adecuadas para ser mostrada a los potenciales clientes compradores. A continuación la vemos limpiado afanosamente, con guantes en las manos, los cristales de los grandes ventanales que dan a la terraza; de rodillas, limpiando el suelo de la cocina; la encimera, el banco… Luego aparece en el salón comedor, arreglando unas flores, quitando las telarañas del ventilador del techo, pasando enérgicamente el aspirador… Y mientras realiza todas estas tareas, como si de un mantra se tratara, la oímos repetir una y otra vez sin descanso:
¡Hoy venderé esta casa! ¡Hoy venderé esta casa!

No queda muy claro en la película que Carolyn venda la casa pero, apuesto a que sí. A continuación voy a recomendarte una serie de consejos muy sencillos para que tu vivienda brille y destaque en el mercado y la vendas en el menor tiempo posible.

• Despersonaliza la vivienda. Retira todas las fotografías y los objetos personales para que los visitantes puedan imaginar los suyos. Está comprobado que las viviendas con menos objetos y muebles se venden antes, ya que permiten a los futuros compradores imaginarse los muebles que ellos deseen poner.

• Vacía y retira aquellos muebles y objetos de la vivienda que se encuentran en peor estado o son demasiados viejos.
• Recoge y ordena las diferentes estancias de la vivienda porque les dará mayor amplitud. Procura que en los dormitorios las camas estén hechas y los armarios y cajones ordenados; en la cocina que no hay platos con restos de comida en el fregadero y cuanto menos accesorios dispersos por la encimera, mucho mejor. Intenta que la entrada o recibidor esté lo más despejada posible sin zapatos, bolsos, abrigos y si los hay que estén colgados y ordenados en un perchero porque será lo primero que vean los visitantes al entrar en casa.

• Limpia toda la vivienda, especialmente los cristales, los baños y la cocina; si es necesario, puedes darle una capa de blanqueador a las juntas de los azulejos de los baños y cocina, así evitarás preguntas incomodas sobre humedades, moho… Te aconsejo también lavar las cortinas.

• Pinta las paredes y techos en color blanco porque aporta mucha luminosidad y amplitud. Esta pequeña inversión marca una gran diferencia y una capa de pintura así como arreglar los pequeños desperfectos (agujeros, desconchones, manchas…) que puedan existir en la vivienda porque le quitarán años a la misma y harán que parezca más nueva.

• Iluminación. Coloca bombillas nuevas en las lámparas y retira las fundidas o de baja intensidad para que se puedan ver bien las estancias.

• Coloca en la vivienda un ambientador con olor a fresco.

• Abre las ventanas y ventila la vivienda antes de hacer la visita. Si la misma dispone de aire acondicionado, enciéndelo antes de la visita. Si hace frio, pon la calefacción. Nuestro objetivo es que el futuro comprador se sienta lo más cómodo posible en la visita a la vivienda.

• Si la vivienda tiene terraza o jardín debe estar cuidado y en perfecto estado. Elimina las hojas secas, las plantas muertas y asegúrate de que las plantas estén arregladas porque dan mucha alegría a los espacios y hacen que parezca que la vivienda esté muy cuidada.

Con estos sencillos consejos verás cómo aumentas el número de visitas a tus propiedades y vendes mucho más rápido. ¡Ya me contarás!